Hablamos del primer volumen de Crossover recién editado por Panini. Un canto de amor al medio en forma de metahistoria superheroica a cargo de Geoff Shaw y Donny Cates

Una obra surgida de lo mas profundo
En la primera página de Crossover, Donny Cates explica que hace un tiempo casi muere. Fue hospitalizado y creyó que no saldría vivo de allí. Lo que le llevó a plasmar sus ideas sobre la muerte, la familia y el legado en God Country. Un tebeo que según sus palabras le cambió la vida. Recientemente, fue ingresado de nuevo. Y pensó que no sobreviviría. Otra vez. Pero esta vez quería hablar de su amor a los cómics. Sus lecturas compulsivas en los noventa de los tebeos de Image. Y creó Crossover.
Acompañamos en nuestra reseña a esta carta de amor a los cómics de superhéroe. Antes de empezar con el análisis vamos a enfrentarnos con el enorme elefante en la habitación del primer número. La frase «el mundo ya nos teme y nos odia lo suficiente por lo que nos gusta» refiriéndose a la afición a los tebeos y el contexto de fanatismo religioso que le rodea es muy ofensiva. Establecer una comparación entre los «supuestos» estigmas que sufren los fans de los superhéroes por sus gustos es cuestionable.

Crossover: cuando los mundos chocan
Y es que dos de las tres películas que más han recaudado de la historia son The Avengers: Endgame y Spider-Man No Way Home, cuando la mercadotecnia de tebeos invade las tiendas y cuando se publican en el mundo, toda clase de cómics es ningunear y faltar al respeto a los verdaderos problemas sociales que hay en el mundo. Es hacer de menos luchas tan necesarias como la del BLM o las de la causa LGTBQ+ y sobre todo es caer en un victimismo fácil que solamente puede causar rechazo entre los colectivos realmente oprimidos. Basta ya de buscar una autovalidación vacía de contenido para nuestros gustos y sobre todo basta de intentar desviar el foco de las cuestiones realmente importantes.
Pido perdón por la chapa, pero tenía que decirlo. Una vez que me he quedado a gusto vayamos con la trama. El 11 de enero de 2017 se produjo un evento que cambió la Tierra para siempre. Un crossover entre todas las editoriales -bueno, todas, todas, solo de boquilla que luego hay que pagar derechos- irrumpió en nuestro mundo, concretamente en Denver, Colorado. Produciéndose una invasión de nuestro planeta por parte de todo tipo de supertipos que llevó a la creación de un domo impenetrable que aisló la incursión del resto del mundo.

Amor al medio y referencias al lector
Años después, la aparición de una extraña niña procedente del interior de la cúpula en la última tienda de cómics de «verdá» provoca que un grupo formado por la protagonista con uno de los nombres más rebuscados de la historia –Ellipsis Howell-, el dueño de la tienda y un adolescente aparvao y tirillas –que además de ser el culpable del incendio y destrucción de la tienda es hijo de un fanático religioso-, quieran llevarla de nuevo a Denver para que pueda volver con los suyos. Y ya de paso, la zagala del nombre raro reunirse con sus padres, porque, ojo cuidado, ella era de allí. Así -fusilando a Grant Morrison de paso- Cates nos cuenta una historia muy sencilla que le sirve para demostrar su amor por los cómics con los que creció en los noventa.
Nada nuevo bajo el sol, pero gracias al buen ritmo que imprime y a la apelación a la nostalgia en forma de invitados «especiales» consigue mantener el interés del lector. El problema es que o se tiene un bajage de lecturas sólido -sobre todo de Image– o gran parte de las escenas y guiños pierden mucha fuerza. Un asunto que unido al funcionamiento a tope de la máquina de clichés hace que el conjunto final dependa más de reconocer los referentes que de la solvencia de la historia en sí misma.

Geoff Shaw, conquistando el universo Image
En el aspecto gráfico la labor de Geoff Shaw es magnífica, además de su espectacularidad en el dibujo, es capaz de dotar a todos los personajes ajenos invitados de una versión reconocible, pero genuinamente suya, evitando así que su particular parezca un pegote añadido. Su estilo se adapta como anillo al guante al tipo de historia que quiere narrar su guionista. Estamos ante uno de esos casos en los que el dibujante elegido parece ser el único que podría haberle dado a la obra.
Shaw se encuentra bien apoyado por el uso del color por parte de Dee Cunniffe. Este resuelve muy bien el reto de diferenciar entre personajes «reales» y ficticios. Algo que es esencial en la propia narrativa de la obra y que resuelto de una manera mas torpe podria haber supuesto un escollo a la hora de afrontar la lectura. Este cuidado grafico, sumado a la propia trama convierten a Crossover en una historia que pese a sus defectos, es interesante por el amor al género que transmite cada una de sus páginas. A ver como evoluciona el invento.

Sobre la edición de Crossover 1
Panini cómics nos presenta este Crossover 1 en un volumen de tapa dura sin sobrecubiertas. En el interior papel y reproducción gráfica de máxima calidad. Como extras cuenta con una pequeña introducción de Donny Cates y una excelente galería de portadas alternativas donde podemos encontrar muchos y míticos autores y personajes de la editorial Image.

Crossover 1
Edita: Panini cómics
Editorial Original: IMAGE COMICS
Autor/es: Geoff Shaw, Donny Cates
Fecha de lanzamiento: 24 feb 2022
Páginas: 176
Tamaño: 17 X 26 cm.
Formato: Tapa Dura
Interior: Color
ISBN: 9788411013680
Precio: 20,00 €
Crossover 1
NUESTRA NOTA - 67%
67%
No esta mal
Un canto, aunque algo desafinado, sigue siendo un canto de amor al comic. Y si bien en este primer tramo no acaba de dar en el clavo, deja unas cuantas ideas interesantes que esperemos en sucesivos tomos, nos dejen mejor sabor de boca. De momento, aguantaremos.