Camille Vannier nos ofrece en Sexo de mierda una descacharrante recopilación de anécdotas sexuales tan veraces como risibles. Un tomo editado en nuestro país por ¡Caramba!

Si lo sé, no vengo
Seamos francos. ¿Quién no ha tenido alguna vez en su vida sexo de mierda? ¿Quien no ha pasado por algún rollo tan cutre o surrealista que no ha podido contárselo a nadie?. ¿Alguien en la sala? Yo, como imagino que la mayoría de los que estáis leyendo esta (mi primera en esta web) reseña, podríamos asentir con una mezcla indefinible de incomodidad y vergüenza en nuestro rostro. Y es que en el mundo de los placeres carnales, como en todas las facetas de la vida, por muchas ganas o expectativas que tengas, siempre cabe la posibilidad del desastre total. Vamos, que si algo puede salir mal, saldrá mal.
Y son precisamente estas anécdotas las que la historietista parisina Camille Vannier -si no conocéis su Instagram, no sabéis lo que os perdéis- ha utilizado para esta obra. Anécdotas propias o de gente de su entorno, pero siempre verídicas y 100% reales (no fake) aunque en ocasiones pueda parecer lo contrario. Estas se dividen en cómodas categorías las cuales os invito a dar un check según abordéis la lectura de la obra, a ver en cuantas caéis. Yo por preservar mi virtud y honor mejor no hago públicos los resultados, que voy a mandar link de esta reseña a familia y amigos, y no es plan.

Eso de lo que me hablas, me suena
El acercamiento a estas microhistorias (por lo general resueltas en una sola página) se hace desde el humor más salvaje y desprejuiciado pero siempre manteniendo el buen gusto. Algo que, dado la temática de Sexo de mierda, podría haber acabado en total desastre. Sin embargo, no es el caso y rara es la anécdota que no nos deja con una sonrisa en el rostro o con un flashback del Vietnam sexual. A mí me ha pasado, y a vosotros os pasará, a un lado o a otro de la historia, os lo aseguro. Sin embargo, repito, todo siempre desde un prisma ligero y agradable.
De hecho, el punto que más puede chirriar a un posible lector es el propio dibujo. No por falta de calidad NI MUCHO MENOS, sino por su estética feísta. Algo a lo que el lector se acostumbra al poco rato, llegando a apreciar la expresividad y la suciedad del trazo que en ocasiones enfatizan, y mucho, cada página. Mención especial a la maquetación, algo que Astiberri siempre suele cuidar al dedillo en sus obras. Esta vez a manos de Manuel Bartual y Alba Diethelm.

Increíble y pese a todo… cierto
Cerrando el tema, que imagino que tendréis cosas mejores (o no) que hacer. Este Sexo de mierda es un tomo que refleja todos aquellos momentos incómodos, surrealistas o directamente imposibles de creer de una manera cercana que consigue empatizar con el lector desde el primer momento. Porque aunque su autora sea una mujer, la obra adopta un punto de vista neutral en la eterna guerra entre sexos. Y esto se agradece, ya que le da al conjunto una pátina unisex la mar de atractiva.
Terriblemente divertida y conceptuado en forma de anécdotas sueltas, sin solución de continuidad, estamos ante una obra a la que pueden acercarse tranquilamente amantes del comic o lectores ocasionales de este formato. De hecho, yo ya he regalado dos copias a dos amigas que no se acercaban a un comic desde hace (qué mayor me siento ahora mismo) décadas. Bueno, bonito y barato, la una pega que puedo poner es que deja con ganas de más. Como mi exnovio, vamos, pero eso es otra historia.

Sobre la edición de Sexo de mierda
Astiberri edita Sexo de mierda a través de su sello ¡Caramba!, que pocas veces tuvo un nombre tan justificado, creedme. En el interior papel y reproducción gráfica de la máxima calidad. No contiene extras, pero vamos, que ni falta que le hace.

Sexo de mierda
Edita: Astiberri
Lanzamiento: 2022
Autora: Camille Vannier
Páginas: 112 pags.
Tamaño: 21×16,5 cm.
Formato: Rustica con solapas
Interior: Color
ISBN: 978-84-18215-95-7
Precio: 12,00 €
Sexo de mierda
NUESTRA NOTA - 85%
85%
Triste, pero cierto
Lo que no se cuenta abiertamente, lo que se susurra a altas horas de la madrugada y con cuatro (o más) copas en el cuerpo. Anécdotas sexuales de todo pelaje que nos sonaran a tod@s. Descacharrante en forma y fondo, se lee en un suspiro, pero las risas duran mucho más.

En lugar de poner algo largo y pretendidamente sesudo, me limitaré a decir que me gusta leer y escribir. ¿Qué esperabais? ¿Sigues aquí aun leyendo? ¡Ponte a ojear mis reseñas y no pierdas el tiempo!