Hablamos del libro La asombrosa vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel, recién editado por Dolmen. Un acercamiento a manos de Danny Fingeroth a la figura de uno de los creadores del universo Marvel con sus luces y sombras.

Jefe de pista carismático.
La figura de Stan Lee en los últimos años ha estado en cierta manera en entredicho. Una forma de ver más claramente lo que pudo ser en el mundo del cómic es leyendo algunos libros que se han ido editando. En esta ocasión tenemos la de La asombrosa vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel. Es evidente que quien crea que era un timador y un jeta redomado no va a cambiar de idea de ninguna de las maneras. Despreciando cualquier labor que hiciese en su momento, aunque también puede estar la otra cara de la moneda. Donde el endiosamiento no deje ver las sombras de este personaje. Difícil es a veces mantener una postura neutra y objetiva, pero ahí radica el sacar lo bueno y malo de cualquier persona y por extensión autor, en este caso.
Si hay algo que no se le ha podido negar a Lee es la forma de venderse así mismo. Podríamos denominarlo como una especie de Don. Ya que quizás cualquiera de nosotros lo podría intentar y no lograr los resultados que consiguió él. Siendo la cabeza visible de la editorial Marvel y por extensión del mundo del cómic de superhéroes en cierta manera. Conforme el guionista, y muchos años editor de Marvel, Danny Fingeroth nos va adentrando en la figura de Stanley Martin Lieber –quien años más tarde se convertiría en Stan Lee– vamos aprendiendo cosas de su niñez, juventud, edad adulta y lo que llegó a hacer o embellecer en su camino. Sea por logros que no fueron tales o por adquisiciones que no eran suyas. Algo que en parte logró gracias a su carisma y don de gentes, todo sea dicho.

Al fin y al cabo una forma de ganar dinero.
Una vez le preguntaron a Harrison Ford –si no recuerdo mal– si le gustaba la profesión de actor. Su respuesta fue que le permitía pagar facturas que era lo que le importaba. Igual no fueron las palabras exactas, pero en esencia era lo que él sentía. Stan Lee no amaba los cómics. No era un guionista o dibujante que hubiese mamado algo desde su niñez y que hubiese acabado siendo su máximo logro al ir cumpliendo años. Lee acabó de “rebote” en un mundo que lo habría cambiado de inmediato por algo de más prestigio –cine, literatura…-, pero le daba dinero. Y sí, el mundo del cómic podía permitirte ganarte la vida de buena manera en esos años si la suerte y el talento te lo permitía.
Porque era un medio que podía venderse bastante bien. Así que optó por seguir ante unas oportunidades que realmente nunca acabaron de llegar. Podríamos entrar también en lo que sería la “prensa rosa” o del “corazón”. Donde tanto su mujer o su hija derrocharon a manos llenas el dinero que iba llegando. Pero para los amantes del cómic serían más bien detalles que importan o no según el estado de cotilleo con que nos levantemos ese día. Lo que realmente importaban eran otras cosas, aunque esas llegasen a influir en la manera de comportarse de Stan Lee.

El método Marvel y la libertad o apropiación de lo ajeno.
Siguen las páginas, siguen los capítulos. Fingeroth nos lleva de la mano a una vida de altibajos y triunfos. Una lectura tan amena que es difícil no sucumbir a esa frase de “venga, una página más”. Viendo sus problemas con Jack Kirby o Steve Ditko. Quien creó, qué y como. A veces teniendo el lector hasta un debate interno de quien dice la verdad o no en ciertos aspectos. Como si de un jurado popular fuese a dictar sentencia según los testimonios. Algo que el autor del libro deja a veces a la libre elección de quien va leyendo a los protagonistas. Gente del medio que trabajó con Lee, unos le adoraban por la libertad creativa que les daba y otros porque precisamente eso podía recalar en que él pudiese quedarse con algo que no era suyo.
Sin poder negarle tampoco que fue quien insistió en dar notoriedad y constancia a no pocos autores en cuanto a su trabajo. Es curioso que el método Marvel se haya quedado en esa archiconocida frase de “hoy toca el Rino”. Que Lee le dijese a John Romita Sr. por ejemplo. Sin embargo, dentro de la polémica de dimes y diretes cabría preguntarse lo siguiente. ¿Sería el Universo Marvel igual sin Stan Lee?. ¿O directamente no habría habido ni siquiera Universo Marvel?. Pudo guionizar menos de lo que figuran en los títulos de crédito y atribuirse méritos inmerecidos. Lo cual es reprochable. Pero leído el libro te das cuenta de que como todo en la vida no hay blancos y negros, sino grises.

Un director sin actores y unos actores sin director.
Lee pudo tener ideas, planificar, dirigir. Pero también Jack Kirby, el propio Steve Ditko y muchos otros. Lo que al final nos lleva a la conclusión con lo que va mostrando Danny Fingeroth de que la explosión creativa fue conjunta. Kirby no dibujó peor sin Kirby, ni Ditko tampoco. Pero el Universo Marvel que se fue formando resultó del cocktail de juntar dichos talentos y la forma de ver Lee algo que podía ser novedoso y atrayente. Es como si un gran actor tuviese que ser contenido y únicamente un director supiese sacarle el jugo necesario para un gran papel. Unos verán que no es así, pero yo acabé notando una subjetividad en este libro que deja la libre elección al lector.
Arrojando tal cantidad de datos y nuevamente testimonios de gente cercana –familiares incluidos– que puedes formarte tu propia opinión. Aunque es evidente que si el odio te ciega hacia Stan Lee, el libro te sabrá a poco y elegirás uno más cercano a tus pensamientos. Donde la citada objetividad se irá a tomar viento y dirás que la de este libro no existe. De todo hay en la viña del señor, obviamente. Al final, lo que importa es que la figura de Stan Lee se pueda valorar en España a través de libros traducidos como es el caso que nos ocupa. Algo que algunos lectores llevaban esperando desde hace ya un tiempo. ¿Recomendable su lectura?. Obviamente sí. Al fin y al cabo hablamos de uno de los co-creadores del universo Marvel. Un hecho irrefutable, todo sea dicho.

Sobre la edición de La asombrosa vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel
Dolmen editorial publica La asombrosa vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel en un tomo de tapa dura sin sobrecubiertas. En el interior papel y reproducción gráfica, como es habitual en Dolmen, de máxima calidad.

La Asombrosa Vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel
Edita: Dolmen editorial
Lanzamiento: Enero 2023
Autor: Danny Fingeroth
Formato: Tapa dura
Tamaño: 17×24 cm.
Páginas: 376 págs.
Interior: B/N
ISBN: 978-84-19380-67-8
Precio: 24,95 €
La asombrosa vida de Stan Lee: Una vida en clave Marvel
NUESTRA NOTA - 80%
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THE MAN
La polémica figura de Stan Lee acaba tratándose de manera objetiva (aunque para algunos la ausencia de “sangre” parezca un obstáculo para su deguste) en un libro con multitud de declaraciones del personas del medio del cómic. Al igual que familiares y gente cercana a él. Con sus luces y sombras, demostrando que los blancos y negros no existen y el gris sería un color primordial en estos casos. Al final hablamos de que es el co-creador del Universo Marvel junto a otros grandísimos artistas.