Hablamos de Thanos: Origen, editado por Panini Comics. Un tomo autoconclusivo que recopila los 5 números de la miniserie Thanos: Rising, a cargo del guionista Jason Aaron y el dibujante Simone Bianchi.

Todos queremos a Thanos
En los últimos años, Thanos se ha convertido en uno de los villanos más importantes de Marvel. Sin embargo esta fama viene de lejos. Es imposible no acordarse de aquella fantástica Saga del Infinito a cargo de Jim Starlin en los años 90. Obras como El Guantelete del Infinito o Thanos Quest demostraron el enorme carisma que podía tener este genocida; el cual tiene una perspectiva y unas intenciones muy diferentes a las de los típicos antagonistas que podemos hallar en el género de superhéroes. Allá donde vaya, él va sembrando muerte y destrucción. Sin embargo, en ocasiones podemos llegar a entender sus motivos y propósito, aunque nunca compartirlo. Hace algunos años, el escritor Jason Aaron se propuso guionizar una miniserie para contarnos la génesis y los primeros años del villano. ¿El resultado? No del todo regular. Se trata de la novela gráfica Thanos: Origen.
Podríamos decir que este cómic salió a rebufo de la famosa escena post-créditos de la película de Vengadores. Escena en la que veíamos por primera vez al villano. Muchos espectadores ajenos a los tebeos desconocían la existencia de este personaje, ya que nunca antes había salido en largometrajes. Es por ello que en el 2013, Marvel le propuso al equipo creativo formado por Jason Aaron y Simone Bianchi de desarrollar una miniserie. Esta mostraría los primeros pasos del personaje. Y es que, en los últimos años parece que hay una corriente editorial inversa. Ya que parece que las películas marcan el desarrollo, la creación y las reediciones de las diferentes cabeceras y novelas gráficas, y no al reves. Una maniobra con el objetivo de que los millones de espectadores de los cines empiecen a aficionarse a la industria del cómic. Pero ese es otro tema.

Thanos: Origen y la búsqueda del sentido de todo
A lo largo de los números de esta novela iremos viendo cómo desde su propio nacimiento, Thanos estaba destinado a sembrar locura y destrucción allá donde pasaba. Seremos testigos de cómo a raíz de distintas situaciones y circunstancias, su carácter se insensibiliza; siendo una persona dura y carente de cualquier atisbo de empatía. Poco a poco su propósito será el de convertirse en emisario de su amada Muerte. Una figura ominosa a la cual servirá con devoción para la desgracia de todos los que se encuentren con Thanos. También observaremos cómo el Titán loco se une a unos piratas y tiene bastantes hijos con diferentes mujeres; todo con el objetivo que buscamos todos en la vida: el de hallar respuestas. ¿Cuál es nuestro cometido o misión? ¿Qué hacemos aquí? ¿De dónde somos y hacia dónde venimos? ¿Qué es aquello que dará el sentido a nuestra existencia?
Sin embargo, la visión que Jason Aaron nos muestra en Thanos: Origen difiere en muchos aspectos Jim Starlin padre del personaje. Aunque siendo sinceros, hay que reconocer que varias cosas relativas a la personalidad del genocida de Titán se ven aclaradas aquí. El ritmo de la obra es bueno, con grandes textos pero resultando una lectura ágil y entretenida. La historia de por sí funciona, aunque cuenta con diversos fallos. Donde más flojea es en el transcurso de la niñez y adolescencia de Thanos; buscando justificar sus primeros instintos psicópatas con el acoso escolar que sufrió. Realmente dar la idea de que alguien que ha sufrido bullying puede convertirse en un brutal e insensible asesino me parece un recurso muy manido. Y una maniobra demasiado fácil a la hora de contar los orígenes de los villanos y poco realista.

Correcto pero sabe a poco
Aunque el tebeo de por sí es disfrutable, con Thanos: Origen se nos queda la sensación de que argumentalmente es una obra poco pulida. Una miniserie que podría haber aspirado a más. En ocasiones es un diamante en bruto al que solo le quedaba ser redondeada en algunos aspectos. ¿Ejemplos? La propia Titán, la chica atractiva pero mala y el acoso escolar como inicio de ese camino a la maldad. También temas tocantes problemas familiares que podrían haberse explorado mejor. Simone Bianchi es un gran ilustrador y se nota que disfruta con la labor que realiza. Los diseños que realiza son espectaculares, hace un excelente uso de la iluminación y la técnica del claroscuro, sus páginas demuestran fuerza y son impactantes.
Así que por este lado poco hay que achacarle a su trabajo, o prácticamente nada. Quizás en las últimas páginas baja un poco la calidad, pero es algo prácticamente imperceptible. Bianchi consigue transmitirnos todo ese miedo que puede generar Thanos de una forma tan asombrosa que resulta admirable. Una pena que en algunos aspectos en lo referente a la historia Thanos: Origen no haya desatado todo su potencial. Y hubiera buscado soluciones más inteligentes en algunos momentos; porque aunque es correcto y notable, podría haber llegado a la excelencia. Aun así estamos ante una obra cuyo aspecto gráfico es, en esencia, prácticamente irreprochable.

Sobre la edición
Thanos: Origen ha sido publicado en España por Panini Comics. Cuenta con un total de 128 páginas. Se trata de un tomo en tapa dura con lomo curvo dentro de la línea Marvel Must-Have. Esta nueva colección sirve para publicar las mejores obras realizadas en La Casa de las Ideas que todo aficionado debería tener y leer. Aquí se recopilan los números 1 a 5 de la miniserie Thanos: Rising.

Marvel Must-Have. Thanos: Origen
Edita: Panini cómics
Autores: Jason Aaron, Simone Bianchi
Número de páginas: 128 pp
Tamaño: 17 X 26 cm.
Contiene: Thanos Rising 1-5
Formato: Tomo en tapa dura
Interior: Color
ISBN: 9788413345390
Precio: 12,99 €
Marvel Must-Have. Thanos: Origen
NUESTRA NOTA - 69%
69%
INEVITABLE
Una obra correcta, con un buen apartado gráfico y entretenida, pero que podría haber dado más de sí. Jason Aaron escribe con el piloto automático y dándonos un cómic muy disfrutable pero mejorable.
Redactora de La Comicteca. Grabo podcasts en A Hideo Kojima Podcast. También tengo un blog sobre cómics. Mutante y vigilante de Gotham City. También me gustan los gatos y el Alavés (sí, son datos intrascendentes).