Hablamos de Roman Ritual, una de las obras de culto del terror patrio recientemente reeditada por Karras Comics. El Torres, Jaime Martínez y Sandra Molina firmando un trabajo que te pondrá los pelos de punta.

El Torres, el maestro –indiscutible– del cómic de terror
Quizás el género que resulta más complicado de llevar al noveno arte es el del terror. Por la naturaleza narrativa del cómic, es todo un reto para los creadores conseguir esa tensión narrativa que asuste al lector. Pero como en todo, hay maestros que se saltan todas las barreras y ofrecen obras capaces de estremecernos hasta el tuétano. Y si tenemos que poner nombre a uno de esos maestros, el primer nombre –y el que se nos viene con más fuerza a la cabeza– es el de El Torres, guionista de este Roman Ritual que hoy reseñamos y unos de los popes indiscutibles en eso de asustar -y mucho- a los lectores.
Y es que los únicos comics que han conseguido que me revolviese durante su lectura o que me replantease seriamente ir a por un vaso de agua a las tres dela mañana por un pasillo oscuro, los ha firmado este guionista todoterreno que nos ha dejado un reguero de obras imprescindible en este –y otros– géneros. Obras como Camisa de fuerza, Goya lo sublime terrible, Phantasmagoria o la GENIAL, El bosque de los suicidas, que próximamente tendrá su correspondiente reseña. Pero no nos desviemos y pasemos a desgranar este clásico de culto del terror. Ah, y no olvidéis vuestros crucifijos.

Algo –oscuro– pasa en El Vaticano
El Padre John Brennan recibe una desesperada misiva de un viejo conocido, el Cardenal Bertino, quien le concede en su lecho de muerte una bula cardenalicia que le permitirá regresar al Vaticano para afrontar la que seguramente sea la misión más importante de su vida. El santo padre ha sido poseído por una entidad demoniaca y ningún otro exorcista ha tenido éxito hasta el momento. Mientras las sombras se extienden por el centro neurálgico de la Iglesia Católica de manera imparable, solo un hombre tiene una mínima posibilidad de evitar un desastre total que tendría consecuencias catastróficas.
Con una premisa tan atractiva como bien desarrollada, El Torres firmó una historia que se convirtió en un clásico instantáneo en su primera edición en 2016. Un trabajo que desarrollaba su trama en un crescendo terrorífico que contenía algunos pasajes que realmente llegaban a inquietar al lector. Pero bajo este envoltorio de terror puro había más de una capa y hallábamos una profundidad inusitada para un trabajo de este género. Roman Ritual tocaba temas como la fe –perdida o mal empleada, según el caso– la corrupción institucional o el problema de la rigidez de las instituciones religiosas.

Un terror que sabe a nuevo
Temas que eran tratados de una manera sutil y que no desdibujaban el núcleo central de la serie, que era el terror. Un terror que se vertebraba principalmente en ahondar en los miedos universales y que sabían tocar la tecla de la base lectora que no podía, sino rendirse ante el trabajo del equipo creativo. Los personajes protagonistas y secundarios tienen una gran complejidad y están construidos sin tirar de cliché. Hecho que aporta un aire fresco al conjunto, evitando reutilizar los tropos más trillados del género, como suele ser habitual en el cómic –o cine y televisión– de exorcismos.
La narrativa de Roman Ritual es tremendamente ágil y tiene una pátina de espectacularidad en ocasiones puramente cinematográfica. El Torres dosifica con el tempo justo la información y consigue mantener en vilo a los lectores hasta un explosivo tramo final en el que es imposible no contener la respiración más de una vez. Sin tiempos muertos ni pausas, el guion funciona como un reloj en parte gracias a su apartado gráfico. Al frente del cual tenemos al dibujante Jaime Martínez y a la colorista Sandra Molina que conforman un tándem creativo bien compenetrado que da cuerpo al guion de la serie.

Un arte mayúsculo
Jaime Martínez aporta un arte de corte realista realmente sólido a la obra. Sobresale a la hora de darles expresividad a sus personajes, algo que llega a su paroxismo cuando entran en escena unas apariciones demoniacas de esas que se quedan clavadas en la memoria. Se nota un gran trabajo de documentación a la hora de ambientar el mundo en el que trascurre la obra. Ya que otro de sus puntos fuertes es la representación de arquitecturas a gran escala e interiores. Su puesta en escena, aunque de corte clásico, es certera y efectiva, dejando un resultado general al que no se le puede poner ninguna pega, siempre engalanado por el gran trabajo de Sandra Molina.
En conclusión, estamos ante un trabajo mayúsculo que se ganó a golpe de talento el estatus de obra de culto. Una serie que sabe trasladar el terror de manera efectiva y que plantea más de una pregunta al lector al acabar su lectura. Agobiante, opresiva, terrorífica, con un guion a prueba de bombas y un apartado gráfico a la altura del mismo Roman Ritual es un imprescindible para los amantes del género que al fin conoce una reedición en condiciones y que afortunadamente, tendrá continuación. Un comic que es imposible que no os deje buen sabor de boca y que es nuestro recomendado para que paséis este Halloween 2022 como manda la tradición, pasando miedo.

Sobre la edición de Roman Ritual I
Karras comics edita Roman Ritual I en su acostumbrado –y ya característico– formato de tapa dura sin sobrecubiertas. En el interior, como siempre, papel y reproducción gráfica de máxima calidad. Como extra, la edición digital añade un epílogo exclusivo que sirve como coda a la obra.

Roman Ritual 1 – Trilogía del exorcismo
Edita: Karras cómics
Lanzamiento: Julio de 2022
Autor/es: El Torres, Jaime Martínez, Sandra Molina
Formato: Tapa dura
Tamaño: 24 x 15,5 cm.
Páginas: 120 pags. (130 pags en la edición digital)
Interior: Color.
ISBN: 978-8-415-85093-9
Precio: 20,00 € (3,95 € la edición digital)
Roman Ritual
NUESTRA NOTA - 95%
95%
Imprescindible
Un trabajo mayúsculo que se ganó a golpe de talento el estatus de obra de culto. Una serie que sabe trasladar el terror de manera efectiva y que plantea más de una pregunta al lector al acabar su lectura. Agobiante, opresiva, terrorífica, con un guion a prueba de bombas y un apartado gráfico a la altura del mismo Roman Ritual es un imprescindible para los amantes del género. El Torres en estado puro, y eso siempre es BUENO.